Cuando todo huele a normalidad, a tranquilidad, parte todo de cero
"Tuve un golpe energético" Partir de cero, otra vez... cuando algo es lo que inquieta
Me muevo buscándote, te busco siempre, te encuentro poco.
Y cuando te encuentro te alejo, me vuelvo a ir.
No puedo enfrentarme a la necedad de acciones ridículas.
No puedo enfrentarme a mi tontera humana cotidiana y soltarme y poco y hablar.
Me haces falta, te quiero decir muchas cosas, que no son precisamente que me gustas o que te quiero, simplemente hablar huevadas, interpretar los "yo también te extraño" inexistentes.
Que sea un día brillante para los dos con un par de recuerdos y un fundar nuevamente la nada.
"Y si vuelves con tus manos yo te juro que las tomaré conmigo" me es inevitable pensarlo, porque me tienes tranquilamente inquieta, quiero saberlo, quiero saber si también te pasa lo mismo.
Aunque sé que hay mucha agua bajo este puente, mucha agua que corre de forma violenta... pero por mi parte no se ha acabado esa necesidad de sanación que me entrega tu recuerdo, tus últimas palabras borrosas en la mente borracha.
Quisiera creer esas palabras que la otra vez me decían, que de verdad pasa algo ahí dentro. Que la vergüenza es solo una creación de mis culpas, de mis eternos ridículos. Quisiera saber que te enternces con mis bobadas y que sigues siendo esa persona libre que me permitó todo.
No sé si esto tiene sentido, forma... pero si pasa algo que me acerque a tí, otra vez, espero podamos conversar, sin nada más que hablar por lo mucho que nos extrañamos.
Quiero, deseo, necesito admirarte más que en fantasías. Quiero saber nuevamente "la admiración es mutua" y no estar atrapada en esta vergüenza de quererte tontamente en secreto -supuesto secreto-... derretirse es poco. Me contentas, me estremeces... te extraño
No hay comentarios:
Publicar un comentario